El verano aún no ha acabado y tenemos que aprovecharlo al máximo. Y no es solo cuestión de tumbona y paella, especialmente si eres padre. Hay multitud de actividades que te permiten disfrutar de buenos momentos en familia y, además, mantenerte en forma. Te mostramos los 7 deportes en familia que puedes practicar si estás de vacaciones en una zona de playa.
Los días de vacaciones pueden hacerse largos y aburridos si no realizas ningún tipo de actividad. Los deportes en familia son una buena opción. Tus hijos estarán entretenidos, gastarán energía y disfrutarán de momentos de calidad con sus padres. Estos son algunos de los siete más divertidos que puedes practicar.
Los beneficios de la natación son bien conocidos. La resistencia que ofrece el agua y el movimiento de la práctica totalidad de los músculos y articulaciones, lo convierten en un deporte de verano perfecto para toda la familia. Puedes practicarlo en la playa y en la piscina, aunque siempre es importante estar alerta, para evitar ahogamientos.
No te limites a nadar de un lado a otro sin más. Reta a carreras a tus hijos y a tu pareja, forma equipos, haz relevos o propón retos, así será mucho más divertido. Además, puedes enseñar valores como la persistencia, la autoestima o la humildad, entre otros.
A los niños les encanta sumergirse en el agua. Una manera de aprovecharse de esta tendencia natural es practicando snorkel. Si las aguas de la playa son tranquilas, disfrutarán mucho de ver los peces y otros tesoros del fondo marino, como piedras o conchas.
En las tiendas de deportes puedes encontrar las clásicas gafas y el tubo para respirar. Si eliges esta opción, has de enseñar bien a los niños, para que no traguen agua al sumergirse. También puedes optar por la máscara de snorkel, que es más segura y permite un mayor ángulo de visión del fondo.
Hay algunos deportes que han adquirido fama en los últimos años. Por ejemplo, el kayak. Existen algunas embarcaciones con sitio para dos pasajeros, e incluso para dos adultos y un niño. Seguro que toda la familia estará encantada de realizar una actividad como esta.
Lo más recomendable es alquilar una excursión al tiempo que contratas las embarcaciones. El mar puede ser traicionero, por eso es mejor contar con un guía que conozca bien la zona. Además, puede llevaros a lugares únicos, como cavernas marinas o arrecifes, por ejemplo.
Una advertencia. Recuerda que el mar actúa como un espejo y es mucho más fácil quemarse. Utilizad siempre un gorro y también protección solar de factor alto en abundancia, para evitar quemaduras solares.
Muchas playas disponen de red para practicar el voley. Es muy divertido y la arena amortigua algunos golpes cuando los niños se caen al suelo. Si no hay instalaciones de este tipo, tienes la opción de comprar tu propia red y llevártela siempre que te vayas de a la playa. Y, si tus niños son pequeños, hay balones más suaves para ellos.
Este deporte requiere mucho esfuerzo físico, así que elige las últimas horas del día para practicarlo. También es necesario que bebas suficiente líquido y utilices crema solar de factor alto, si es que aún no hay sombra.
Si las normas de la zona lo permiten, puedes optar por practicar deportes sobre ruedas en los lugares habilitados para ello. La bicicleta, los patines o el patinete son algunas de las opciones. Eso sí, es un deporte que requiere una actividad alta y por tanto ha de realizarse fuera de las horas de máxima incidencia solar y sin forzar demasiado. Además, has de llevar suficiente agua fresca para todos y así evitar los golpes de calor.
El pádel o el tenis no son las mejores opciones para un caluroso día de verano. Sin embargo, hay otras opciones muy divertidas y menos exigentes físicamente. Por ejemplo, puedes jugar al ping pong o a las palas, uno de los clásicos en la playa. Además, conseguir estos materiales es muy asequible.
El senderismo es otro de los deportes en familia practicados habitualmente en el periodo estival. Las más indicadas son aquellas fáciles, con puntos de agua potable por el camino y que se realizan parcial o totalmente a la sombra de árboles o montañas. También es interesante que haya agua para bañarse en el recorrido, como piscinas naturales, ríos o cascadas.
Practicar deportes en familia durante el verano es una buena opción para disfrutar de unas buenas vacaciones. Pero, además de planear bien las actividades y mantener a toda la familia activa, hay que hacer algo más. Debes asegurarte de elegir el mejor alojamiento para ti y para los tuyos. Es muy importante que tenga todas las garantías y la mejor ubicación. Un camping para ir con niños puede ser una buena opción.
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